Titulo original : The manitou (USA)
Otro titulo : Retorno desde la quinta dimensión (España)
Al interior de un hospital dos médicos observan desconcertados las radiografias pertenecientes a Karen Tandy, una mujer que presenta una extraña malformación ubicada en su espalda la cual crece dia a dia en forma inexplicable. Ella es amiga de Harry Erskine, un adivinador de poca monta que se gana la vida embaucando a su clientela conformada por señoras muy mayores de edad, quienes ven en él a un sabio y encantador consejero. Ambos personajes han mantenido una relación sentimental en el pasado, y deciden encontrarse nuevamente debido a las dudas de Karen sobre la operación quirúrgica a la que será sometida para extirparle el tumor en su espalda. Llegado el dia en que la intervención se va a llevar a cabo, un evento sobrenatural dará inicio a los extraños sucesos que están a punto de ocurrir. En el consultorio de Harry, una anciana empieza a proferir palabras en un dialecto desconocido, y luego, sale levitando de la habitación para caer por las escaleras y estrellarse en el primer piso. Desconcertado por lo ocurrido y con una extraña sensación, Harry acude al hospital, donde descubre que la operación no se ha realizado pues una fuerza maligna impide a los médicos acercarse al cuerpo de Karen. Convencido de estar tratando con poderes inexplicables, empieza una investigación que lo conduce hasta un médico brujo descendiente de una tribu india, llamado John Singing Rock, el cual es su única esperanza para detener al espiritu demoniaco, el manitú, que esta a punto de llegar a nuestro mundo a través de Karen, lo cual desatará un terror cósmico sin precedentes.
A fines de los años 70`s, el cine de horror norteamericano continuaba explotando a mas no poder la temática sobrenatural, especialmente en lo referente a las posesiones demoniacas, echando mano a toda fuente posible. Nuevamente la literatura se presentó en forma oportuna, esta vez por obra del escritor Graham Masterton, al publicar en 1975 su novela titulada "El Manitu", un relato que debe mucho a la mitologia desarrollada por el gran Howard Phillips Lovecraft, aquella que nos habla de los seres llamados "los Primordiales", quienes habitaron este mundo en tiempos remotos, y que, una vez desterrados, ahora se esconden en dimensiones invisibles, mientras acechan esta existencia buscando la forma de volver y dar fin a la humanidad. El tema central del regreso del mal, la venganza sobre el usurpador, la lucha dimensional, los rituales ancestrales y las ceremonias profanas, son las notas terrorificas mas saltantes del mito lovecraftiano, y se encuentran en muchos de sus relatos, y en forma muy especial en su breve novela "El que acecha en el umbral", realizada en coautoria con el escritor Augusto Derleth.
Esta impresionante historia de horror, que sabe incluir elementos propios de las leyendas indigenas de Norteamerica, recrea escenarios convertidos en bosques encantados, donde predomina la inquietud a causa de una maldad pura y estremecedora, cuya presencia corrompe la realidad en forma monstruosa. Es precisamente este relato el cual sirvió de inspiración al escritor Masterton para realizar su citada novela. El autor hace uso de la figura del médico brujo conocido como Misquamacus, y de la amenaza que representa su regreso del pasado; asimismo, la fuerza del mal que se invoca en el climax terrorifico es, indudablemente, uno de los seres primordiales lovecraftianos. Según señala el escritor Charles P. Mitchell en su libro "The complete Lovecraft filmography", correspondería a Ithaqua, el monstruo de los hielos.
Como podemos notar, se trata de un relato de horror muy serio. Sin embargo, como ha ocurrido muchas veces, una cosa es la novela escrita y otra muy distinta es lo que puede resultar la adaptación cinematográfica, como veremos a continuación.
Hablemos acerca del director William Girdler. Nacido en Norteamerica en el año de 1947, fue sin duda uno de los realizadores mas destacados del cine de terror de serie B surgidos en la década del 70, lo cual se deduce al tener en cuenta su productiva filmografía merecedora de una singular atención. Su carrera dió inicio con el film "Three of a meathlock", una historia de horror escrita por él mismo, en el año de 1972. Posteriormente volvería con otro título del género como es "El asilo de Satán" en el año 1975. Logró el apoyo del productor Samuel Arkoff, fundador de la mítica productora AIP, para la cual realizó las peliculas "Zebra killer" y "Abby", ésta última, una black-exploitation de la reconocida "El exorcista", que incluye a actores como William Marshall, el recordado "Blácula", Terry Carter, actor del film "Foxy Brown" y la morena Carol Speed. Su nombra ganaría aun mayor notoriedad gracias a otros titulos como "Grizzly, garras de la muerte", lanzada en el año 1976, en plena moda de animales monstruosos gracias a "Tiburon" de Steven Spielberg, y "El dia de los animales" en 1977. Más alla de considerar la dudosa calidad artistica de algunas de sus obras, era innegable el éxito economico que éstas habían logrado, lo cual fue suficiente para sus productores.
Embarcado en su nuevo trabajo, la adaptación de la novela de Graham Masterton, Girdler escribió su guion junto a John Cedar y Thomas Pope en tan sólo tres dias. Ubicado en la silla de director, dio rienda suelta a toda una experiencia visual muy particular, cuyo resultado se ha ganado un sinfin de criticas, muchas bien merecidas, un bodriete en opinión fundada, pero al mismo tiempo ha logrado atraer a todo un grupo de cinéfilos cautivados por su desternillante puesta en escena, para quienes lo bizarro, lo torpe y lo irreverente constituyen todo un encanto digno de ser admirado.
El relato puede dividirse básicamente en dos partes bien diferenciadas. La primera la constituyen tanto la presentación de los personajes protagónicos, asi como el dar a conocer la intriga sobrenatural existente. Esto es desarrollado dentro de un contexto real, en exteriores del medio urbano, o al interior de espacios cerrados como el departamento de Harry Erskine, y en otros lugares donde la investigación es llevada a cabo. En estos momentos puede apreciarse el tono predominante del film: la intención por desarrollar una historia de horror que pretende ser muy seria, pero, contrariamente, se muestra desenfadada. Estos elementos irrumpen en forma delirante en ciertos momentos, como ocurre en la muerte de la clienta de Harry y su levitación con una extraña expresión en su rostro, o la secuencia de espiritismo donde el monstruo del más alla asoma su cabeza en medio de una mesa. El momento más logrado en base a un adecuado suspenso es el que se desarrolla en el hospital al dar inicio a la operacion del tumor en la joven protagonista. El resto de la investigación es narrada en forma ligera, donde lo más llamativo es la presentación de otros personajes para completar la peculiar galeria, en medio de diálogos explicativos sobre la extraña naturaleza del mal al cual se enfrentan. El encuentro con el indio John Singing Rock permite el inicio de la segunda parte del film.
En esta segunda parte la pelicula trasciende, hasta llegar a lo más representativo del cine bizarro moderno. Los hechos se desarrollan al interior del hospital en el cual la joven Karen se encuentra recluida por las fuerzas del mal a la espera del renacimiento de aquel ente maligno. Los esfuerzos de Harry Erskine y John, el brujo indio, al lado de los médicos para controlar aquella amenaza, se ven enfrentados al poder cósmico de Misquamacus, el médico brujo de 400 años, que revive del cuerpo mortal de Karen en una escena que hace uso de efectos visuales poco convincentes tecnicamente, pero suficientemente atractivos. La atmosfera opresiva y el toque sanguinario se aprecia en algunas escenas, mientras que los efectos de maquillaje sobre el inquietante huésped del más alla revelan a un actor de bajisima estatura en su intención por representar a un ser maligno de otra dimensión.
El caos que se desata al interior del hospital, que incluso llega a envolver en una ola de frio todo un piso del edificio, llega a su punto más alto con una extraña representación cósmica que irrumpe en la habitación, llenándola de estrellas y rayos luminosos, que hoy bien podrían verse en una discoteca. La otra dimensión es representada en forma alucinógena, con tuneles de luces al estilo "2001 odisea espacial" lo cual pretende emular, extraños efectos de sonido y para mayor delirio, un despliegue de poder cósmico que parece sacado de la ciencia ficción de bajo presupuesto, que finalmente muestra el singular despropósito de éste film. Sin embargo, a pesar de sus evidentes fallos, la pelicula logra lo que toda obra filmica busca: concitar la atención del espectador de principio a fin en base a un buen ritmo narrativo que no decae. Y en el mejor de los casos, logra la satisfacción de haber visto una experiencia visual llena de tropiezos y cierto mal gusto, pero divertida en su osadia.
Por si fuera poco, el filme cuenta con un interesante reparto de actores, como vamos a ver a continuación. En primer lugar, teniendo a su cargo el rol protagónico encontramos al recordado actor norteamericano Tony Curtis, considerado uno de los mejores actores de su generación y asimismo toda una estrella de Hollywood, que pudo ser visto en grandes producciones de primer nivel durante los años 50´s y 60´s, llegando al año 1969 con su destacada actuación en el filme "El estrangulador de Boston". En la década del 70 su aparición en la gran pantalla empezó a hacerse cada vez más escasa, por lo que su carrera encontró refugio en el medio televisivo. Allí se le recuerda por su participación en varios telefilmes, y protagonizando al lado del británico Roger Moore la serie "The persuaders". Según esto, no resulta extraño verlo participando en una producción como la que nos ocupa, pero sin duda podemos afirmar que su labor no decepciona, ya que Curtis, en lo que seguramente no es uno de sus mejores trabajos, aun asi aporta suficiente credibilidad a su caracterización de Harry Erskine, incluso con ciertos toques de humor como se puede ver en las primeras secuencias, y lleva sobre sus hombros el desarrollo del relato.
Completando el reparto de actores, debemos mencionar la participación de Susan Strasberg, actriz que es más recordada por ser hija de Lee Strasberg, actor que fue maestro en el Actors Studio, e impulsor del método de actuación que adaptó de Konstantin Stanislavski, forjando actores como Al Pacino o Dustin Hoffman. Volviendo a la actriz, su rol resulta discreto en cuanto a su personaje, ademas de desaparecer durante buena parte del metraje de acuerdo al guión. Michael Ansara es el actor que encarna al indio John Singing Rock; Stella Stevens es Amelia Crusoe, quien ayuda en algún momento a Harry Erskine en su investigación. Y finalmente, destacamos la presencia de Burguess Meredith, veterano actor ya fallecido, de amplisima trayectoria que incluya la saga "Rocky" con Sylvester Stallone. Aqui, el señor Meredith es un experto antropólogo que encuentra muchas explicaciones al misterio del manitou.
Cabe mencionar al actor que encarna al maléfico Misquamacus: se trata del actor de baja estatura Félix Silla, quien cuenta con una lista interesante de apariciones en muchas producciones, desde la serie "Los locos Adams", donde es nada menos que "El tio Cosa", hasta ser el robot Twiki de la serie "Buck Rogers en el siglo XXV"; en cuanto a largometrajes, se le puede encontrar en rarezas como "The brood" del canadiense David Cronenberg, y hasta en "Batman returns" de Tim Burton, como un simpático pinguino de las alcantarillas.
El apartado técnico, si bien en lo referente a efectos visuales puede dejar la impresión final de cierto modo descuidado, en realidad estuvo a cargo del especialista Richard Edlund, cuya trayectoria incluye filmes como "Star Wars" y "Battlestar Galactica", y posteriormente otros como "Poltergeist" y "Die hard", hasta trabajos más recientes como "Air force one". La música corresponde a Lalo Schifrin, sin duda la banda sonora más mala que debe haber realizado en su vida, pues su sonido parece sacado de alguna producción televisiva de aquellos años.
Por último, mencionamos que con respecto a su director, el recordado William Girdler, éste falleció lamentablemente en un desafortunado accidente aéreo, al estrellarse el helicóptero en el que viajaba por las islas Filipinas, en busca de locaciones para su siguiente filme titulado "The overlords", el cual, por lo que se sabe, iba a ser su incursión en el tema de los ovnis. Algo digno de verse, que duda cabe, pero el destino no lo quiso. Asi es la vida.