Cuatro jóvenes amigas emprenden un viaje por carretera el cual es interrumpido inesperadamente al encontrar el cuerpo de una mujer, victima de unos sujetos que aparentan ser cazadores. Al huir del lugar, trasladando el cuerpo a la comisaria más cercana, ellas descubrirán que la peor pesadilla de sus vidas recién esta por comenzar.
Tenía muchas ganas de ver, de una vez por todas, un trabajo del director Adrián Garcia Bogliano, realizador de importantes titulos del cine de horror latinoamericano como "Habitaciones para turistas", "Masacre esta noche", "36 pasos", entre otros. Tengo entendido que es español de nacimiento, aunque es hijo de padres argentinos, habiendo crecido en la ciudad de la Plata y desarrollado toda su carrera en Argentina, desde donde se ha dado a conocer. Convertido en uno de los más importantes representantes de un nuevo cine de horror, su primer guión lo escribió a los 19 años, el que correspondió a su obra "Habitaciones para turistas", cuya filmación le costó todo el esfuerzo inicial que conlleva una sufrida opera prima. El resultado obtuvo un rotundo éxito en festivales internacionales, pero con el revés de no contar con una adecuada exhibición en su propia tierra. A pesar de ello, Garcia Bogliano y sus socios recibieron el apoyo necesario para dar inicio a una carrera en ascenso en cuanto a repercusiones y reconocimiento.
"No moriré sola" es su quinto largometraje (contando su "pelicula de terror interactiva" llamada "Caja de acertijos" del año 2004), y en ella Bogliano, luego de dar nota con el slasher americano, el cine de fantasmas, y la sicodelia y bizarrismo dignas de un cine de serie B o Z, se atreve con un género ajeno a la filmografia de Latinoamerica, al menos que yo sepa. En todo caso, en adelante, si alguien me pregunta por alguna pelicula de "rape and revenge" sudamericana podré citar alegremente este filme. Recordemos que la "rape and revenge" (términos que uno aprende en internet) refiere a aquellas viejas peliculas donde la temática central es una historia violenta que involucra la violación y tortura de alguna frágil victima, normalmente jovencitas féminas, y la posterior conversión del repudiable torturador en sufrida presa a causa de la venganza desatada por su cruel acto. Suele recordarse como titulo emblemático la setentera "Last house in the left" :
http://pequenoscinerastas.wordpress.com/2009/07/07/los-monstruos-del-terror-domestico/, del año 1972, y tambien a la seguidilla de titulos ocurrida en aquella misma década que buscaron explotar dichas historias mórbidas, como ocurre en "Trampa para un violador"
http://eldiariodedarkerr.blogspot.com/2006/08/la-casa-sperduta-nel-parco-1980.html, "El dia de la mujer"
http://www.imdb.com/title/tt0077713/, o "Violacion en el último tren de la noche"
http://www.imdb.com/title/tt0073836/, cada cual logradas en lo suyo, es decir, en reflejar crueldad, un ambiente hostil y enfermizo, asi como en desatar la ira sobre las bestias de turno.
En el caso de esta pelicula, Garcia Bogliano logra un trabajo muy deudor de estas viejas raices, actualizando la propuesta en un logrado ambiente rural sureño, donde, no una, no dos, sino cuatro chicas son violentadas por una banda de asesinos a sangre fria que dan rienda suelta a su lado más animal, en medio de un paisaje desolador que resulta acertado. En cuanto a la narración, el director plasma su historia friamente en cada uno de sus momentos, casi prescindiendo de musicalización alguna, y tomándose todo el tiempo posible en varias de las situaciones iniciales, aunque en ocasiones resulte una exageración (como ocurre en la comisaria). Del mismo modo ocurre en los momentos más tortuosos para estas mujeres, aunque, por el contrario, aquí la fórmula funciona adecuadamente: las imágenes son bastante explicitas en su crueldad o, por qué no decirlo, en ese morbo implicito de estas peliculas, para conectar la atención del espectador; la crueldad de estos momentos reflejan ese dolor tanto como las heridas, el polvo y la tierra en los rostros de las victimas. En ese sentido, el film es bastante correcto a sus intenciones de género y no lo traiciona, siendo una propuesta audaz y, digamos, valiente para una cinematografia latinoamericana más bien pálida en estos menesteres; y aunque suene redundante anotarlo, pues lo haré : resulta mejor en su contundencia que el infame remake de "Last house on the left" visto hace poco, aunque, como dije, esto sea cuestión obvia y fácil de lograr.
El protagonismo se centra en las cuatro jóvenes actrices, de las cuales Gimena Blesa y Marisol Tur son figuras recurrentes del cine de Garcia Bogliano, mientras que Magdalena De Santo y Andrea Duarte no tienen más de dos filmes en su haber. Sobre sus actuaciones, pues estas denotan su carácter amateur, pues mayormente se reducen a expresar el sufrimiento y la rabia de la situación limite a la cual se enfrentan, y en función a ello resultan tan efectivas como lo fueron en su momento las actrices Sandra Peabody o Lucy Grantham del filme clásico de Wes Craven; no diré Camille Keaton de "Day of the woman", que su caso me resulta más memorable. Porque, precisamente, en "No moriré sola" la violencia resultante, aquella que nace de la rabia, no me resulta tan memorable y, más bien, la segunda parte del consabido relato es casi resuelta en pocos minutos, a diferencia de la parsimonia mostrada en toda su hora inicial, lo cual, a mi juicio, le baja puntos al conjunto; vamos, que a estas alturas uno espera más, sin duda. Sobre la actuación de los malosos, pues digamos que son simples máquinas de tirar y matar.
En definitiva, con sus mas y aún con algunos de sus menos, consideramos a "No moriré sola" como un digno esfuerzo; una pelicula muy valiente y un valioso producto de género, por haber nacido en un medio poco dedicado a ello, lo cual sin duda va a dificultar poder verla como se debe, en una sala de cine. Esto, y el hecho de mantener la vigencia de este tipo de historias, son aspectos que constituyen su mayor aporte, y nos da más interés en la sincera labor de Adrián Garcia Bogliano, y su particular forma de hacer cine.